GAP es el nombre de un sistema de entrenamiento que proviene de la unión de las tres palabras que lo definen: Glúteos, Abdominales y Piernas.


Practicar GAP es realizar un conjunto de ejercicios dedicados a fortalecer y a tonificar estas tres zonas del cuerpo que muchas veces son las más afectadas por un estilo de vida sedentario. La acumulación de grasas en estas zonas suele ser frecuente -en especial, en algunas mujeres- y los problemas derivados de su falta de entrenamiento son la flacidez de la piel, la mala circulación y la falta de tono.

Para combatir estos problemas surgen los ejercicios GAP. Una nueva manera de trabajar nuestro cuerpo de cintura para abajo con unos resultados muy positivos en las personas que los practican.

Una sesión de GAP suele estructurarse con el mismo esquema que las demás actividades: después calentar para activar y preparar nuestro cuerpo, se realiza una serie de ejercicios localizados destinados a tonificar glúteos, piernas y abdominales para acabar con estiramientos y relajación. Las sesiones son en grupo y son un buen complemento a otras actividades cardiovasculares como el aeróbic o el step.

Al principio, GAP puede ser un poco duro porque son ejercicios muy focalizados que trabajan músculos que usamos poco en nuestra vida diaria pero, al cabo de unas semanas, los resultados se notan: glúteos más definidos, piernas más fuertes y, combinado con el trabajo cardiovascular, un vientre más plano.